El Lobo derrotó 90-83 a Rivadavia de Mendoza por una nueva fecha de la Liga Argentina de Básquet. El máximo anotador del Albiazul fue Matías Cuello, con 22 unidades.
Tenía que ser el cierre perfecto y así lo fue. Es que el elenco de Mauro Tartaglia había sufrido mucho la primera fase de la competencia con niveles intermitentes, pero en la segunda etapa del torneo arrancó con dos alegrías consecutivas en calidad de local.
Anoche fue 90-83 ante Rivadavia de Mendoza, un equipo que comenzó con un 17-9 en el tablero (máxima del encuentro) pero poco a poco Gimnasia dio muestra de sus réditos defensivos y la buena tarea en ofensiva para irse al descanso por una luz de distancia: 40-36.
De allí hasta el cierre fue palo y palo, con intensidad en el juego por parte de ambos equipos, aunque con mayor liderazgo del Lobo, que contó con el trabajo de La Bella y Remolina en la conducción, las conversiones perimetrales de Cuello (4/7) y los buenos ingresos desde el banco por parte de Arca y Sesto.
De esta manera Gimnasia dominó las acciones hasta el cierre, se quedó con una alegría ante su gente por 90-83 y se va al descanso con la mente positiva en busca de un regreso triunfal el 9 de enero, cuando visite a Racing de Chivilcoy.
