Con un golazo olímpico de Brahian Alemán, Gimnasia derrotó a Olimpo en Bahía Blanca 1 a 0 y se metió en el bolsillo la primera victoria del campeonato. El Lobo fue bastante más que el Aurinegro y mereció ganar por más goles, pero la mala puntería en la definición lo obligaron a sufrir hasta el final. ¡Vamos Tripa!
Y llegó el día. Después de esperar y esperar, Gimnasia pudo sumar de a tres en la Superliga y abrochó la primera victoria de la era Mariano Soso.
En Bahía Blanca, con un viento tedioso y ante un tímido Olimpo, Gimnasia sacó pecho de entrada. Es que el Lobo siempre manejó los hilos del encuentro, con una postura clara de mantener el dominio del balón, buscar la generación de espacios y la salida limpia al ras del suelo. Este último ítem, por momentos, volvió a ser eje complicaciones en defensa, aunque en menor medida que en las fechas anteriores.
El elenco tripero contó con innumerables chances de gol de cara al arco de Gabbarini, que tras sacar algunas pelotas difíciles comenzó a perfilarse como figura del encuentro.
Gimnasia lo tuvo con jugadas de todos los colores, con Faravelli, Dibble, Ibáñez, Alemán. Y fue precisamente el volante uruguayo el que logró penetrar la valla del Aurinegro, cuando a los 26 minutos de juego sacó una disparo extraordinario de un tiro de esquina que se coló por arriba del arquero y se transformó en golazo olímpico.
Después, lejos de resguardarse atrás, el Lobo fue por más. Nunca cambió su libreto y acorraló al conjunto local. Increíblemente, el Gimnasia desperdició situaciones muy netas de gol (he ahí el aspecto a corregir) y por eso sufrió más de la cuenta cuando Olimpo se aproximaba con lluvia de centros al área del seguro Martín Arias.
En el complemento el asunto fue el mismo: Gimnasia siempre tomó la iniciativa, doblegó a Olimpo con una gran tarea en todas las líneas, y el Arinegro atinó a contragolpes rápidos. Cerca del final, los bahienses pusieron contra las cuerdas al equipo de Soso, pero la victoria ya estaba sellada.
Así, con buen juego y con la correcta implementación de la idea de Soso, el Lobo se aferró a su primer triunfo en el campeonato y ya piensa en su próxima parada, que será en el Bosque ante Lanús el próximo sábado. ¡Vamos Tripa!
