La Copa Argentina, como la Copa Centenario que ganó Gimnasia hace 25 años, se define por eliminación directa. Gimnasia se juega la chance de llegar a semifinales, donde jugó en 2016 con Alfaro. ¿Cómo vienen los santiagueños? ¿Cómo le fue a Gimnasia en esa cancha? ¿Pedro mete algún cambio? Leelo en esta nota.
Este equipo no abruma pero tampoco se deja llevar. Merece lo que tiene. Gana, empata y pierde por la mínima. Sin ser defensivo, sabe que le cuesta dañar, aunque encontró solidez con la columna vertebral Alexis / Piovi / Rinaudo / Silva. Melluso y Gómez acompañan y se ganaron sus puestos. Lo demuestra el cero en el arco como con Boca y Godoy Cruz, rivales de palo y palo.
Gimnasia juega en un estadio cargado de historia reciente. Aflora el recuerdo oscuro post derrota 3 a 0 con Rafaela. Los policías santafesinos haciendo señas de pulgar para abajo, Laverni riéndose de forma provocativa y la hinchada que gozó días después con los goles de Niell en 2009. Un año después, otra derrota con la crema que se revirtió con un 3 a 1 en el bosque. En fin, en esa cancha nunca Gimnasia se fue aunque sea con un punto (Perdió también en 2003, 2009, 2013 y 2014).
Pero hoy es otro contexto y el equipo que va a enfrentar. Gimnasia ya no es punto, si no favorito. Una cancha chica demostrará quién será más inteligente. Gimnasia llegará descansado y sin dificultades de lo que sigue, porque Vélez está lejos en el calendario.
Troglio apostará a dos referentes que se conocen . Silva, en su mejor momento, se juntará con el armenio para herir al rival aprovechando las dimensiones de la cancha. Un cambio de sentido común hará que Hurtado espere con Calderón en el banco, en la única modificación con respecto al triunfo ante Godoy Cruz. Por su parte, serán claves las segundas jugadas de Gómez y Tijanovic para penetrar en velocidad. Vale recordar que tanto Rinaudo como Faravelli podrán jugar más allá de las expulsiones.
¿Qué se sabe del rival?
Central Córdoba es un Club histórico de Santiago Del Estero, próximo a cumplir 100 años de vida y que busca mantenerse en la B Nacional, luego de descender en 2017 y retomar hace meses a la segunda categoría del fútbol argentino. Los últimos dos partidos los empató sobre la hora, ambos con penales polémicos, ante Sarmiento en Junín y ante Brown de Adrogué de local. Este último fue víctima por Copa Argentina en Octavos de final, pese a que venía embalado por dejar afuera a Independiente.
Los santiagueños, que vienen de 15 días sin jugar (ante Ferro lo impidieron los Juegos Olímpicos de la Juventud), suelen llevar una buena cantidad de gente de visitante. En esta edición le sienta bien jugar de punto, porque eliminó a Vélez (1-1) y a Tigre (2-0). Ante el equipo de Heinze lo hizo por penales, material de estudio para Alexis Martín Arias en caso de llegar a esa vía.
Al igual que Gimnasia, no recibe ni convierte muchos goles y mantiene dos líneas de cuatro en sus bases. Tiene jugadores experimentados como el delantero Diego Jara (Ex Unión y Atlético Tucumán) y el arquero César Taborda (Ex Estudiantes). Su técnico, Gustavo Coleoni, expresó que le hubiese gustado jugar este partido ante Boca. “Si tengo que ir de luna de miel, dame la más linda”, dijo.
Rafaela es un punto medio entre los 1115 kilómetros que separan a La Plata con Santiago del Estero. Después de varias idas y vueltas, motivo que enojó a filiales y agrupaciones que piensan viajar, Gimnasia jugará el sábado desde las 15.10 para continuar con la buena racha.
