Gimnasia es pueblo y así lo demostró el bosque, aunque los grandes medios de comunicación construyan desde la chicana y la polémica. Una mención al pos clásico después de los dichos que no suman. OPINIÓN
Un jugador referente del visitante tenía todo para irse con la medalla del triunfo y su jerarquía. Venía del fatídico archivo del verano y las piñas por un partido amistoso. Los medios sí le dieron cámara, porque siempre habla después de los partidos, y tenía la oportunidad de hablar de fútbol. Pero lo pincharon y volvió a caer, reiteró la dialéctica del odio y quiso culpabilizar a un rival, o dos.
Afuera, un pibe del Lobo le pidió un autógrafo y le firmó los guantes, aplaudido por varios. El hincha del Lobo tiene otra filosofía y se puede fastidiar, pero el domingo no cayó en agresiones en los vestuarios sino todo lo contrario.
Otro mediocampista cayó en la tentación de oponerse a Maradona, justo cuando todas las tribunas lo reciben con su merecido homenaje. Le dijo que le gustan las cámaras, y aunque luego intentó omitirlo, las redes retomaron ese momento del primer tiempo –encima después vino un codazo sin pelota- y el máximo ídolo futbolístico argentino recibió agravios sobre su persona.
Por si fuera poco, Marcos Rojo se burla en redes de una frase maradoneana en relación a su origen, en otra acción que demuestra la idiosincrasia de un club que se denomina familiar pero educa en tono de burla, soberbia y clasismo.
Por eso, no se entiende por qué hay hinchas que se siguen fastidiando con las declaraciones clasistas de Andújar y Fernández, si son eso. Esa es su identidad, el ganar como sea y sin importar el método, estigmatizar y burlarse del rival amparado por medios porteños y alguna corporación platense.
Gimnasia es el pueblo, son las barriadas que ayer llegaron en micro y los hinchas que juntaron el mango para ir a la cancha, es Favaloro, Alicia, el Diego y el Indio retomando su factor social, es el Tiade y los deportes amateur solidarios, en un contexto de tipos con plata que gestionan mal. Por eso, mejor miremos los problemas de #Gimnasia, que son más urgentes y no nos comamos la curva.
