Puede decirse que el de esta noche fue uno de los mejores partidos de Gimnasia en la era Néstor Gorosito. Sí, sin dudas. Porque el Lobo anuló a Racing en el Bosque, le cortó los circuitos y fue letal en ataque para quedarse con tres puntos de oro.
Pipo lo planteó de igual a igual. Y la decisión clave pasó por el aporte que hicieron Sosa y Chávez en el retroceso. Ambos entendieron que el fuerte de la Academia estaba por las bandas y dieron más de una mano a la hora de marcar. Y después, claro, explotaron adelante. Un despliegue absoluto de los volantes triperos.
Gimnasia se acomodó en defensa y no le dio margen de acción al equipo de Gago. Y cuando pudo, pegó. Fue temprano, a los 6 minutos de juego: córner, cabeceó Sosa, tapó el arquero y entró libre para el rebote Eric Ramírez.
La Perla, que todavía espera el día de la renovación de su vínculo, realizó un trabajo fenomenal por todo el frente de ataque. Y después de que Racing empardara el asunto con un buen gol de Copetti, al atacante tripero lo bajaron en el área y el flojito Falcón Pérez pitó penal. Alemán le dio fuerte al medio y Gimnasia se fue al descanso con una ventaja merecida.
El segundo tiempo fue lo mejor del Lobo, por lejos. Asfixió a su rival y nunca puso en riesgo la victoria. La defensa, sólida. Cardozo, una máquina. Y arriba explotaron todos, incluso con una gran y fundamental tarea de Soldano.
Alemán se hizo cargo de una pelota quieta a varios metros del arco cuando el reloj marcaba los 20 minutos. Y el uruguayo sacó una bomba espectacular que dejó sin chances al arquero Gómez. Gol de otra galaxia y Gimnasia comenzaba a bajar el telón.
Pudo haber sido más, pero el VAR le ahogó otro grito a Ramírez cerca del final. Y el que entró con todas las luces fue Tomás Muro. Recostado por la derecha, el pibe hizo lo que quiso y, en el ocaso del partido, habilitó a Colazo que, solito, la tiró afuera. Era el cuarto y estaba bien.
Y el que también está bien es Gimnasia. Que sigue estirando su buena racha y que aprobó con holgura el examen que se le presentaba hoy. El Lobo de Pipo es cosa seria y el viernes irá a Rosario para medirse con Central. ¡Vamos Basurero!
