Mientras el plantel de Gimnasia continúa sin iniciar la pretemporada y ya está más de un mes por debajo del resto de los equipos de Primera, en el Lobo negocian con Pipo Gorosito para llegar a un acuerdo en cuanto a su casi segura salida del Club.
A saber: en el ocaso de la gestión pasada, Gorosito firmó un contrato premium con Gabriel Pellegrino. Hoy, ese contrato resulta impagable para Gimnasia. Se trata de uno de los montos más importantes de cuerpos técnicos en el Fútbol Argentino. Si Pipo no acepta rebajarse el sueldo, entonces su salida es un hecho.
En los últimos días hubo reuniones varias y ningún acercamiento. Hoy por hoy, la dirigencia evalúa la mejor forma de lograr una salida prolija del DT que no cueste tanto en lo financiero. Algo está claro: el Lobo tiene una deuda importante con Gorosito y la tiene que pagar.
En ese último aspecto, uno de los nombres que viene tomando fuerza es el de Chirola Romero para asumir como DT del primer equipo, aunque eso se sabrá cuando efectivamente Gorosito se vaya. ¿Hay chances de que se quede? Ínfimas: Pipo debería aceptar una reducción considerable de su contrato para continuar.
La realidad indica que Gimnasia está sumergido en una profunda crisis económica, repleto de deudas y con un déficit operativo mensual de 94 millones de pesos. ¿Cómo se llegó hasta este punto? Preguntas que nunca tienen respuestas concretas.
En paralelo, el plantel de fútbol sigue sin entrenar y ya corre con muchísima desventaja con respecto a los otros equipos. En teoría, el 3 de enero arrancarán los entrenamientos en Estancia Chica. Desde esa fecha, tendrán solamente 24 días de preparación para el inicio de la competencia oficial, que está pautado para el 27.
