Se acerca el Clausura y el plantel tripero continúa trabajando intensamente. Mientras la dirigencia la pelea para abrochar otro refuerzo, Cocca y sus dirigidos se hacen la cabeza de que hay que sacar a relucir el orgullo de vestir la camiseta de Gimnasia para superar otra pésima situación. Fotos: Prensa Gimnasia.
Pueden ser los mismos, incluso alguno menos, pero todos, como dijo alguna vez el Gato Sessa están en el lugar donde eligieron estar, donde más les gusta, donde lo que corre por las venas es sangre azul y no un frío miedo a perder.
En situaciones límites es donde se ven los verdaderos hombres; y estos que supieron sacar a Gimnasia de la condena del descenso trastabillaron y lo dejaron nuevamente al borde del abismo. Y es así y ahora hay que hacerse cargo.
Por eso, al margen de los nombres que puedan llegar a último momento hay que empezar a pensar en que al Lobo lo volverán a salvar los hinchas. Desde la tribuna o adentro de la cancha. A muchos ya los conocemos y a otros comenzaremos a inyectarle la pasión inigualable que da la camiseta azul y blanca.
DOBLE TURNO PRODUCTIVO
Cada entrenamiento es capital que se obtiene en este momento ya que ese minuto a minuto junto al entrenador es fundamental para entender su filosofía de juego y para aceitar las comuniones entre los integrantes del plantel.
Esta mañana se efectuaron trabajos físicos intensos tanto en el campo como en el gimnasio y por la tarde, la idea de Cocca fue seguir jugando al fútbol con la intensión de endurecer las cargas que se habían ablandado con los partidos de pretemporada.
Para el martes, la cita es nuevamente a las 9.30 en Estancia Chica para seguir trabajando. La gente entiende que lo mejor es dejar entrenar tranquilos a los jugadores y está bien. Es tiempo de poner todo de cada uno de los hinchas nuevamente para zafar del descenso. Luego sí, deberá llegar el tiempo de la autocrítica y de exigir lo mejor para la institución. Ahora hay que salir adelante.
DE BLASIS A FERRO
En una clara política de ceder jugadores a préstamo a otros clubes para que consigan foguearse, Pablo De Blasis de 21 años, pasará a formar parte del plantel de Ferro Carril Oeste.
