Pendiente de la situación de Rinaudo y Ormeño y pensando en el reemplazante de Chrirola Romero, el Lobo trabajó para volver al triunfo.
El Sindicato de Árbitros Deportivos de la República Argentina (SADRA), entidad que nuclea a buena parte de los árbitros del fútbol argentino, entre ellos a Saúl Laverni, denunció a Fabián Rinaudo y Álvaro Ormeño por las declaraciones que realizaron tras el cotejo con Arsenal.
Esperemos que esto no repercuta en una sanción ya que eso sería además de injusto un gran problema para Diego Cocca y el equipo en torno al partido del sábado frente a Banfield.
Con este tema latente, Gimnasia comenzó esta mañana en Abasto una nueva semana intensa de entrenamientos poniendo el eje en quién será el reemplazante del expulsado Chirola Romero en el sector derecho de la línea de volantes. Podría ser Diego Villar o Lucas Castro.
Además, el plantel bajo la tutela del entrenador intentó volver a la calma tras un fin de semana agitado debido a la derrota y la bronca contra Laverni.
Se habló mucho, primero con el presidente Gisande y luego con el entrenador y se puso manos a la obra con trabajos regenerativos y algunos ejercicios en el gimnasio para aflojar las cargas.
El Lobo sigue adelante con el apoyo de su gente. Se sabe que hay chances de salir adelante y a eso hay que apuntarle. Con tranquilidad y mucho trabajo.
