Gimnasia se trajo un valioso empate 0 a 0 frente a Banfield y alimentó un poco la esperanza de pueblo tripero que está sufriendo por el Club. El planteo propuesto por Morant fue acertado ya que neutralizó a su rival y hasta pudo haber conseguido el triunfo en dos jugadas claras. Hay que seguir trabajando para subir en la tabla. FOTOS.
Gimnasia rescató un empate valioso en su visita al Florencio Sola. El equipo de Morant, a costa de sacrificio y entrega, logró mantener el cero por segundo partido consecutivo. Eso sí: el Lobo es el único equipo de las cuatro categorías del Futbol Argentino que no ha marcado goles como visitante. De todas formas, el punto de hoy sirve y mucho para encarar con algo más de confianza el último tramo del Apertura, en el que Gimnasia llegó a las 10 unidades.
Si antes de comenzado el partido a cualquier tripero le preguntaban si firmaba el empate, seguramente la gran mayoría habría aceptado con entusiasmo. Es que en frente tenía al Banfield de Falcioni, que debía ganar para aumentar sus chances de clasificar a las copas.
Y de entrada nomás el Lobo planteó un partido áspero, saliendo a presionar desde arriba, con Rojano y Córdoba que no se cansaron de apurar a los defensores rivales. En el medio, ante la ausencia de Fito Rinaudo, Morant tiró a la cancha a Frezzotti y buscó asfixiar a los generadores de juego del Taladro. Así, entre el rubio mediocampista y Alejandro Capurro se las arreglaron bastante bien para no dejar jugar a Walter Ervitti y compañía.
En el primer tiempo Gimnasia no inquietó, pero tampoco fue inquietado. Salvo algún que otro centro al área tripera (quizás la principal falencia de los Mens Sana fue que siempre le cabecearon en su territorio), Banfield no logró filtrarse en la defensa Mens Sana, y las pocas situaciones de peligro que tuvo el local, vinieron gracias a la pelota parada. El Lobo apostó a jugar de contra, con Aued haciendo de guía, Milton Casco yendo y viniendo por el andarivel derecho, y los dos puntas corriendo cada pelota como si fuera la última.
BANFIELD TUVO LA PELOTA Y EL LOBO LAS CHANCES
En el complemento no cambiaron mucho las cosas. Banfield se tiró unos metros adelante, pero siempre chocó con la solidez de la defensa de Gimnasia. Ervitti se paró abierto por la izquierda y se dedicó a mandar centros a la olla, que siempre terminaron en manos del Gato Sessa o en despeje de los defensores.
El Taladro fue el dominador del balón, pero falló en la ofensiva. Tal es así que las dos situaciones más claras las tuvo el Lobo. Morant mandó a la cancha a Méndez y a Jiménez, y fue una gran jugada del Lorito la que derivó en un mano a mano de Rojano que, increíblemente, definió por arriba del travesaño. Pocos minutos después, un pelotazo de mitad de cancha dejó a Córdoba solo frente a Bologna, pero el arquero del Taladro evitó la caída de su vaya con una tapada magistral.
Daba la sensación de que el Lobo podía ganarlo sobre el final de contragolpe, pero Pompei dijo basta. Los 3 mil triperos que coparon la tribuna visitante del Florencio Sola se fueron contentos con la actuación de un equipo que, conociendo sus propias limitaciones y las virtudes del rival, planteó un partido cerrado y, en un terreno siempre dificultoso, logró rescatar un punto que vale oro.
SÍNTESIS DEL PARTIDO
Banfield (0): Enrique Bologna; Santiago Ladino, Mauro Dos Santos, Víctor López y Marcelo Bustamante; Marcelo Quinteros, Emmanuel Pío, Walter Ervitti y Sebastián Romero; Gabriel Méndez y Rubén Ramírez. DT: Julio César Falcioni.
Gimnasia LP (0): Gastón Sessa; Abel Masuero, Pablo Fontanello, Ariel Agüero y Leandro Sapetti; Milton Casco, Alejandro Capurro, Alejandro Frezzotti y Luciano Aued; Antonio Rojano y Jorge Córdoba. DT: Pablo Javier Morant.
Goles: No hubo.
Cambios: PT: 40´ Sardella por Pío (B). ST: 13´ Barrales por Quinteros (B), 23´ E. Méndez por Capurro (G), 31´ Jiménez por Aued (G), 35´ Carrusca por G. Méndez (B), 39´ Graf por Rojano (G).
