INCESANTE ALIENTO: La localía en el clásico divide aguas en el ambiente tripero pero todos coinciden en hacerle bien al Club.
A minutos de comenzar un nuevo clásico, el viejo, debatido y sumamente importante tema de la localía sigue dando tela para cortar. Por un lado están aquellos que, desde la polémica decisión de Muñoz de abandonar NUESTRO ESTADIO, para convertirlo en un sitio triste cediendo a presiones e intereses ajenos, permitiendo fijar localía en 25 y 32, juraron fidelidad eterna al Estadio del Bosque. Estadio que se mantuvo vivo gracias al esfuerzo y la pasión que sólo el amor por (y para) Gimnasia puede movilizar en estos casos. “Locos, utópicos” dirán algunos, “héroes” recordarán otros.
La cuestión es que no será “el impenetrable” del Bosque el estadio que albergue el más importante acontecimiento deportivo de la Ciudad. Todos sabemos, no hace falta que las estadísticas lo refuercen, el Lobo en el Bosque se hace bien fuerte en este tipo de enfrentamientos. Sin embargo, las estadísticas dicen que en 25 y 32, Gimnasia no ha ganado un solo clásico. Los números de estos duelos ahí disputados causan escalofríos, pero las rachas están para romperse y en este sentido han trabajado Cappa junto cos los jugadores durante la semana.
Lo cierto también es que tras el triunfo en Santa fe y la euforia causada por la llegada de Guillermo, las 18000 butacas que ofrece el Estadio del Bosque parecen ser pocas a la hora de alojar tanta pasión junta. También es cierto que Gimnasia se ha caracterizado por ser una institución “inclusiva” dentro de la sociedad platense y justamente la exclusión no forma parte de nuestro vocabulario.
¿Algunos dirán por que no jugamos en Racing o cualquier otro estadio que no sea el de 25 y 32? La respuesta desde la Comisión Directiva es que jugar en 25 y 32 no representa costo operativo alguno, y la verdad que en los duros momentos que atraviesa la institución, todo suma.
Cada vez que visitamos a Colón o a Newell´s (por citar algunos claros ejemplos) nos dan ganas de tener un estadio similar, pero para esto hace falta crecer en varios sentidos y tener voluntad dirigencial. Y eso en el fondo eso es lo que más bronca da. Porque podemos bancarnos jugar en otro estadio algún que otro tiempo, pero el objetivo final debe ser siempre el de tener un Estadio del Bosque remodelado y ampliado a la altura de las circunstancias, para que entre todo el pueblo tripero. Bregamos por eso.
Pero hoy la realidad es otra y se enmarca en un proyecto que como siempre, hay que apoyar. Estemos en el lugar que estemos, alentemos incesantemente. El Lobo nos necesita más unidos y fuertes que nunca.