Fernando Monetti (4): No brindó la seguridad de siempre. Esta vez salió varias veces a destiempo, como en el segundo gol de Ríver donde quedó a mitad de camino y Díaz marcó de cabeza.
Gonzalo Soto (3): No tuvo un buen partido. Se lo notó muy nervioso, y eso lo llevó a cometer impericias en el fondo tripero. En el primer gol se quedó protestando por un agarrón de Dominguez y se olvidó de marcar.
Marcelo Goux (3): Siempre llegó a destiempo. Se lo vio demasiado lento y los delanteros millonarios hicieron lo que quisieron con él. La edad le pasó factura. Salió a cortar sin ritmo en el primer gol y dejó en soledad a Funes Mori.
Oliver Benítez (3):Con muy poco fue el mejor de la saga del fondo. Tuvo que trabajar constantemente porque Gimnasia no paraba de perder la pelota en el mediocampo. Ganó bastante de arriba, pero por abajo dejó millones de dudas. Se complicó con frecuencia.
Milton Casco (4): Por proyección y por ser el único del mediocampo que creó algo de peligro, Casco terminó siendo de lo mejorcito que tuvo Gimnasia. Se lo vio rápido por su banda y más de una vez penetró en terreno rival. Pero claro, solo no puede.
Emiliano Méndez (2): Le queda enorme la camiseta que heredó de Rinaudo. Pierde las marcas, pierde pelotas, pierde lo que venga. Nunca aporta en la recuperación, y cuando intenta salir jugando, casi siempre lo hace mal. Desastroso.
Alan Ruiz (4): Tuvo un buen partido, aportando dinamismo, velocidad y buen juego al mediocampo, pero se lesionó y debió abandonar la cancha. A partir de allí, Gimnasia no volvió a ser el mismo.
Ariel García (3): Nunca llegó hasta el fondo; tampoco defendió. Su tarea fue andar sin brújula por el sector izquierdo de la cancha. Se extraña al pibe de las primeras fechas.
Pablo De Blasis (4): Ingrao le endosó la responsabilidad de armar juego y el pibe hizo lo que pudo. Arrancó bien, movedizo y con ganas pero con el correr del partito su juego se diluyó, más aún con la salida de Ruiz.
José Vizcarra (5): Hizo un gran desgaste, moviéndose por todo el frente de ataque y bajando a colaborar algunos metros. Fue el jugador más peligroso de Gimnasia. Atinó en los pases, se animó a la gambeta y a él le cometieron el penal. Por toda esa entrega fue la figura del Lobo.
Gonzalo Vargas (2): Lo único que hizo en el partido fue patear débil y mal direccionado un penal. Después jamás le llegó el balón, ya sea por no hallar espacios o porque el mediocampo tripero fue una máquina de perder pelotas.
INGRESARON
Dardo Miloc (3): Entró por Ruiz, pero claramente es un jugador más defensivo. Intentó controlar el medio pero lo pasaron por arriba. Todavía le falta para pisar Primera.
Líber Quiñones (3): No entró nunca en juego porque la pelota no le llegó. Él tampoco la buscó.
Jonathan Chaves (-): Pateó un tiro libre que pudo haber ingresado pero en el arco estaba Chichizola.
DT Y ÁRBITRO
Osvaldo Ingrao (mal): Ante las bajas obligadas hizo cambio de piezas y mantuvo el esquema. Si bien de arranque del Lobo no fue malo, todo se derrumbó tras la lesión de Ruiz. Allí el técnico del Lobo optó por Miloc, un jugador de características más defensivas y Gimnasia se quedó sin creadores de juego en el medio, porque De Blasis tuvo que actuar en soledad. Tras el gol de Funes Mori dio la sensación de que el partido estaba sellado, sobre todo porque Gimnasia nunca siquiera amagó a ir por la igualdad. La inexistencia de un nexo entre el medio y la delantera, y la falta de un referente terminaron sepultando las pocas ambiciones del Lobo. Tampoco Ingrao halló en el banco de suplentes el remedio para esta situación.
Alejandro Toia (mal): Amonestó en exceso. Cobró faltas que no existieron y por momentos se le fue el partido de las manos. El penal debió ejecutarse de nuevo porque el arquero se adelantó y además hubo invasión.
