Tan federal como la República: informe detallado de Carlos Vázquez sobre el regreso de la competencia propuesta por la AFA.
En esta desquiciada lucha que se ha encarnizado en AFA frente a la senilidad de Julio Grondona, un sustantivo (que de colectivo tiene cada vez menos) se ha puesto de moda: “federalización”. La palabra asusta (y mucho) a los popes afistas, por lo que se han lanzado en una ciega cacería por el significado de la palabra que acompaña al nombre de la Patria. Lejos de encontrar la acepción más adecuada, a los jefes del fútbol nacional se les ha dado por reeditar un viejo torneo oficial no regular que hasta el momento sólo se había disputado en 1969 (al esbozo de Megatorneo mejor ni recordarlo como intento de federalización).
Así fue como los longevos dirigentes de AFA salieron de las cuevas para, fieles a su estilo, anunciar la vuelta de la Copa Argentina. El formato fue tan mal explicado como poco reglamentado, pero es de muy sencilla comprensión. Sólo asustan sus dimensiones.
Lo cierto es que hace un tiempo atrás, no sólo comenzó a disputarse esta mega edición (¿cuál será la causa para que todo tenga que ser "enorme" al federalizar?), sino que ya estamos en las postrimerías del debut de Gimnasia en la Copa Argentina, evento que contará con una final que también fue simbólicamente pautada para el 22 de mayo próximo.
Como en la vieja edición de 1969, la copa se está disputando con partidos de eliminación directa y continuará así hasta el final. Pero esta vez, dado que la iniciaron 154 equipos más que hace 42 años, no habrá dos partidos por ronda sino que en apenas 90 minutos o en los penales se resolverá quién sigue en competencia y quién se vuelve con las manos vacías.
Sabido es que la primera Copa Argentina consagró a Boca Juniors como campeón de entre los 18 equipos que jugaban el Metropolitano (River, Vélez y los alfileres de Zubeldía jugaban la Libertadores y no participaron de la Copa), el campeón de Primera B de 1968 (Almagro) y 13 equipos invitados de las “provincias federales”.
De aquellos 32 clubes, en esta edición no tomarán parte All Boys de Santa Rosa, el multicampeón riojano Américo Tesorieri, el Lipton Football Club -que en 2006 ganó su última liga correntina-, Sporting de Punta Alta y el desaparecido Los Andes de San Juan, que el 10 de marzo de 1980 se fusionó con Independiente para dar origen al actual Atlético Trinidad, eliminado por Unión Villa Krause en su segundo partido de la Copa actual.
Cuando en 1969 se creó la Copa Argentina, se incentivó a los planteles ofreciéndole al campeón una plaza en la Recopa Sudamericana 1970. Sin embargo, Boca se ganaría el lugar al adjudicarse el Metropolitano, por lo que cedió la plaza que otorgaba este certamen al sub-campeón copero, Atlanta. En esta edición está en juego una plaza para la Copa Sudamericana 2012.
La experiencia del Lobo en 1969 se acabó en apenas tres días. Debutó el 6 de febrero en Posadas al enfrentar a Guaraní Antonio Franco, pero cayó 2-0. El 9 se jugó la revancha y, en medio de una catarata de goles que acabó en un 4-4, se concretó la eliminación tripera.
Ahora los misioneros ya han quedado afuera de la Copa y el Lobo recién comenzará a desandarla en los últimos días de noviembre cuando, por el grupo 2, debute en el Estadio que la AFA le imponga a la zona (sería el Ciudad de La Plata).
Su rival será el 14° equipo sorteado de los 24 que provienen de esa masiva eliminatoria disputada en 122 partidos entre equipos de las B, C y D, los Torneos Argentinos A y B, más los últimos 5 equipos de la B Nacional que no descendieron y los tres ascendidos. Este sorteo se realizará el 20 de octubre y los que ingresarán al bolillero serán: General Lamadrid, Defensores de Belgrano, Sarmiento (Junín), Estudiantes (Caseros), Colegiales, Barracas Central y Sportivo Italiano, por la Primera B; Central Norte (Salta), el cordobés Sportivo Belgrano (San Francisco), Talleres (Córdoba), Racing (Olavarría) y Ramón Santamarina (Tandil), por el Torneo Argentino A; Central Córdoba (Rosario), Villa Dálmine, El Porvenir, Sacachispas y Excursionistas, por la Primera C; Racing (Trelew), Sarmiento (Resistencia), Atlético Paraná, el sanjuanino Unión Villa Krause, el mendocino Deportivo Guaymallén y Atlético Policial (San Fernando del Valle de Catamarca) por el Argentino B; el heróico Deportivo Riestra, único representante de Primera D; los recién ascendidos a la B Nacional Atlanta, Guillermo Brown (Puerto Madryn) y Sportivo Desamparados (San Juan); y los últimos cinco que no descendieron de la B Nacional en la temporada 2010-2011, Patronato de la Juventud Católica (Paraná), Ferrocarril Oeste, Chacarita Juniors, Defensa y Justicia e Independiente Rivadavia (Mendoza).
En esta Copa, cada partido es una final. El Estadio que la AFA disponga para la disputa del grupo 2 no variará hasta las semifinales por lo que, si finalmente se confirma que La Plata será su sede, en caso de que el Lobo logre ganar tres partidos seguidos -aunque sea por penales- podría encontrarse al clásico rival para disputar los cuartos de final de una extravagante Copa Argentina.
La incentivación, además, existe. Está en los 200 mil pesos que esperan al plantel si gana el primer partido, cifra que pagará la organización y que se incrementará de a 100 mil pesos hasta semifinales, donde obtendría 800 mil pesos. El campeón se consagrará, además, con 1.500.000 pesos, gracias al aporte de la “magia federalizadora” que realizó la empresa de marketing deportivo Santa Mónica.
