El Lobo se trajo un empate del sur gracias al orden que mantuvo. El Coco San Esteban fue uno de los responsables.
La razón principal por la cual Gimnasia se llevó un punto frente a Banfield fue el orden que mantuvo durante todo el partido. La solidez defensiva que mostró el conjunto de Sanguinetti fue clave en el desarrollo del encuentro.
El estandarte de la buena noche de disciplina táctica fue el Coco San Esteban (6.5) quien reflejó en todo momento una gran concentración. El experimentado defensor del Lobo, mostró su mejor cara y terminó siendo la figura del partido.
A su lado y apenas un escalón más abajo estuvo Renato Civelli (6) quien también estuvo muy metido en el encuentro y manejó con criterio los momentos en que el conjunto del sur amenazó con romper la estabilidad defensiva de Gimnasia. Habló muchísimo y no dudó en despertar a sus compañeros cuando fue necesario.
El chileno Álvaro Ormeño (5,5) estuvo prolijo para defender, pero sin lugar a dudas dejó en claro que pesa mucho más al momento de sumarse al ataque tripero.
Del otro lado del terreno pero con la misma función, Federico Domínguez (5,5), redondeó un discreto partido: lo más destacable de su actuación fue el peligro que acercó al área rival cuando estuvo a cargo de la ejecución de las pelotas paradas a favor de Gimnasia.
Los volantes del Lobo, una vez más, se sacrificaron al máximo por el equipo. Mauricio Yedro (5,5) corrió muchísimo y nunca perdió la concentración. A su lado, el Tata Escobar (6) volvió a sacar a la luz su corazón y entrega: raspó en todos los sectores del terreno y se quedó con la mayoría de las pelotas disputadas en ese sector.
Por la banda derecha, Ignacio Piatti (6), fue la manija del Lobo durante el primer tiempo. Su gran despliegue con pelota dominada acercó un poco de peligro al área local, sin embargo, durante el segundo período, su buen juego disminuyó considerablemente.
Por el carril izquierdo, Diego Villar (5), no entró demasiado en el partido. Tuvo en su cabeza la jugada más clara del cotejo pero su disparo pasó al lado del palo derecho de Cristian Luchetti.
El mayor problema del equipo albiazul volvió a ser el peso ofensivo: Juan Neira (4,5) redondeó una floja actuación y en la única oportunidad clara que tuvo, remató casi de forma displicente a las manos del arquero de Banfield.
Antonio Pierguidi (5,5) ingresó por Diego Alonso que volvió a dejar el campo por la lesión muscular que lo tiene a mal traer desde el comienzo de campeonato. El Tony lejos estuvo de enloquecer a la defensa local pero su movilidad durante el segundo tiempo provocó algo de peligro.
Juan Cuevas (5) ingresó para aportarle juego al equipo pero no logró meterse de lleno en el partido. Su eléctrico dominio de pelota produjo faltas a favor del equipo que Gimnasia no pudo capitalizar debido a la ausencia de un claro referente de área.
Sin lugar a dudas el resultado fue justo y el punto obtenido en el Florencio Sola es bienvenido. Igualmente, el Lobo no está en condiciones de brindar por los empates y el próximo fin de semana deberá volver a la victoria para así comenzar a olvidarse definitivamente de los resultados adversos de este campeonato.
