Pedro Troglio sabe que la colocación de Gimnasia de mitad de tabla hacia arriba no es cuestión para desviar la mira. OPINIÓN.
Por el momento, los pasos a seguir de este objetivo planteado se vienen cumpliendo al pie de la letra, y esos 25/30 puntos propuestos para el Torneo Inicial no parecen estar tan lejos. Sin dudas, para cualquier equipo, el partido clásico suele ser una bisagra donde el carácter demostrado termina vislumbrando lo que será la próxima etapa, y en relación a esto, el domingo pasado Gimnasia tuvo una importante exposición y sabe que no puede bajar los brazos si quiere seguir por el buen camino.
Más allá de que el conjunto tripero divide solamente por la temporada corriente, hoy en día se ubica en la primera posición con 1,750 de promedio (14 puntos sobre 8 partidos jugados), y sin dudas ese número demuestra que el Lobo atraviesa un buen presente en relación no solo al sistema de juego con el que se siente cómodo, sino que también en cuanto a la sumatoria de unidades. Hasta la fecha se disputaron 24 puntos, y quedan 33 por jugarse.
En lo que va del campeonato ningún partido ha sido fácil para Gimnasia, y más allá del comienzo fantástico de 9 puntos en 3 partidos, el Lobo tomó el cable a tierra que lo hizo bajar a la realidad donde, a fuerza de empates y derrotas, supo encausar la mira de su objetivo. Como dijo Troglio: “El hincha que creía que íbamos a ganar todos los partidos con el comienzo que tuvimos, estaba muy equivocado”.
De la mano de Pedro, Gimnasia consiguió una impronta de juego que no tenía hace años. De esta manera, será cuestión de seguir recorriendo el mismo camino para llegar al objetivo final, que consigo también acarrea un proyecto que comenzó por octubre de 2011 cuando el Lobo pisaba débil en las últimas ubicaciones del Nacional B.
