Es momento de aprovechar la oportunidad, disfrutar con madurez y sin violencia, pensando en el regreso del público visitante. OPINIÓN.
El 5 de abril de 2009, en el Estadio Ciudad de La Plata, se jugaba el último clásico entre Gimnasia y Estudiantes con público visitante. En aquella oportunidad el Lobo fue el “local” en un terreno ajeno y el partido terminó 1-1, datos que sólo sirven a la estadística y para guardar en el archivo. Desde aquel encuentro hasta el próximo 26 de enero, habrán pasado más de 1700 días, un poco menos de cinco años, para que la fiesta de la ciudad trasladada unos 400 kilómetros al sur, vuelva a tener el color y el calor merecido con el folclore que es propio de este tipo de eventos.
Ahora bien, si de la prohibición del público visitante en el fútbol argentino hablamos, en esta rueda también giran y están involucradas las autoridades no sólo deportivas, sino también las provinciales, que toman medidas incoherentes, contradictorias e ilógicas en relación a lo que determinó la máxima entidad futbolística.
Por un lado, tenemos al Jefe de Gabinete que afirmó que en el Final 2014 también asistirán a las canchas sólo los hinchas locales, medida que viene siendo vigente por la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) hace siete meses: "Por el momento no va a haber hinchas visitantes", dijo Jorge Capitanich. Del otro lado, se sostienen decisiones donde las visitas podrán acceder a los estadios en Argentina.
En diciembre último, la AFA resolvió que si se daba una hipotética final en el Torneo Inicial entre los que peleaban el campeonato (Newell´s, Vélez, Lanús o San Lorenzo), el partido definitorio se jugaría con ambas parcialidades. Ilógica número uno.
Por la Copa Argentina, como es de público conocimiento, la asistencia de ambas hinchadas es efectiva cada vez que se desarrolla un partido. El Ministro de Seguridad bonaerense Ricardo Casal excluyó el tema del debate diciendo que en ese torneo no se manifiestan grandes movilizaciones, cuando en etapas de definiciones esto no sucede de tal manera. Ilógica número 2.
Por último, los Torneos de Verano que se anunciaron el pasado 7 de enero, también tendrán dos parcialidades según contaron los organizadores de la televisión, el titular del APreViDe, Oscar Boccalandro y el secretario de Deportes provincial, Alejandro Rodríguez, entre otros. Ilógica número 3.
Que estas últimas tres determinaciones sean ilógicas está pura y exclusivamente relacionado a que no se vinculan con lo que admitieron las autoridades de AFA y la Provincia. No hay discusión sobre si las medidas son acertadas o equivocadas, sino que no se condicen en absoluto.
Mar del Plata será el domicilio del retorno de un Gimnasia - Estudiantes con público visitante por mucho tiempo y es momento de aprovechar esta posibilidad para disfrutar de un espectáculo, el más importante para la ciudad, con total madurez, sin violencia y haciendo de un partido de fútbol una verdadera fiesta, conviviendo ambas parcialidades sin problemas. Si todo sale bien, se puede demostrar que a futuro, quizá en la segunda parte del año, puedan volver a verse las canchas repletas y teñidas de dos colores. Que así sea.