Lucas Landa se fue a Rumania y Kletnicki busca club. Además, siguen surgiendo nombres como posibles refuerzos.
En la carrera por llegar al Apertura 2008 de la mejor manera posible, Gimnasia tiene un primer rival que es la lista de bajar para armar el plantel que se viene. Es que a la extensa nómina de jugadores que se van del Lobo hay que sumarle a Lucas Landa, quien fue cedido a préstamo al Unirea de Rumania.
La negociación se acordó en términos de préstamo por una temporada con una opción de compra. A Gimnasia le quedaron 110 mil dólares y no trascendió el monto de la cláusula por la compra.
Así, el Chino se despide del Club y ahora jugará la Copa UEFA con su nuevo Club. Un salto para el pibe Landa, valore del Club, que lamentablemente no pudo disfrutar de buenos torneos con la azul y blanca.
Por otro lado, el que se iría en los próximos días es Carlos Kletnicki, ya que se sabe, que la búsqueda de un arquero es un hecho y que de suplente quedaría Pablo bangardino, mientras que de tercer arquero estará Monetti.
Por eso, la lista de bajas es la siguiente: Lucas Landa, Sergio Leal, Federico Domínguez, Ignacio Quinteros, Renato Civelli, Roberto Salvatierra y el juvenil Oroná. También se espera por las ofertas que hay de Newell´s en busca de Escobar y de Boca y Panathinaikos por Nacho Piatti. Habrá que esperar a ver cómo evolucionan las negociaciones y qué pasa con Ormeño, que aunque se niegue, estaría negociando con Independiente.
LOS QUE PUEDEN LLEGAR
En torno a los posibles refuerzos hay que decir que poco se sabe en estos últimos días acerca de cómo avanzan las negociaciones. Los de Sessa (increíble por cierto) está por llegar a su fin y si no viene se buscará otro arquero. Messera está arreglado de palabra y Leandro González vendría a definir su llegada recién el lunes.
Además, hubo un contacto con Pedro Irala (de Danubio) y con el uruguayo Lama, de Defensor Sporting.
Sin dudas, habrá que esperar a ver qué pasa con Piatti, ya que también de eso depende el capital de Gimnasia para contratar.
Hay idas y vueltas, pero lo cierto es que se maneja mucho hermetismo para no dejar caer ninguna negociación.