Más de 600 triperos festejaron los 15 años de la obtención de la Copa Centenario en UPCN. Nota de www.mundolobo.com.ar
Nota: www.mundolobo.com.ar
Foto: Prensa Gimnasia.
Héroes de una historia, que se forjó en el Bosque
A 15 años de una de las mayores hazañas deportivas de Gimnasia, Guillermo Sanguinetti, el Indio Ortíz, Ariel Pereyra, Jorge Gregorutti, el Moncho Fernández, Javier Lavallen, Pablo Morant y el masajista Juan Castro, tuvieron su homenaje, que se hizo extensivo a todos los integrantes del plantel campeón de la Copa Centenario.
El evento, contó con la excelente conducción de Andrés Pagani de Lobo Está (Martes 21.00 hs Canal 5), en un salón de UPC, que estuvo colmado por más de 500 triperos. La organización fue de los incansables integrantes de la Filial Pampa Sosa, en conjunto con La Granja y Olave. Fue una noche emotiva, bien tripera, dónde hubo sorteos y hasta los bombos de la 22, que no podían faltar.
También fueron agasajados los referentes del actual plantel, en agradecimiento por su compromiso y vuelta al club. Subieron al escenario, el Pampa Sosa, Chirola Romero, Diego Alonso, Teté González, y Gastón Sessa, acompañados de Mario Díaz, el coordinador de fútbol. Estuvieron el vicepresidente Fabián Cagliardi, y los directivos Santiago Barbieri, Laureano Durán, Pablo Blanco y Flavio González, entre otros. Los campeones, recibieron una plaqueta de Laureano Durán y Santiago Barbieri, en representación de la comisión directiva.
No pudo asistir Mariano Messera, que también fue homenajeado por su regreso al club. Para tener en cuenta, Potrerito Messera, con 16 años, estuvo presente en la tribuna, el día de la obtención de la Copa Centenario. El actual coordinador de fútbol, Mario Díaz, fue uno de los que se disfrazó de Lobo aquella tarde.
Uno de los picos de mayor emoción de la fiesta, fue cuando se proyectó un video, que mostraba a una mujer de cabellos rubios, en distintos momentos de su vida y en diferentes canchas del país. Ariadna Rueda, más conocida como “La Rusa”, tuvo su merecido homenaje. Recibió un diploma por su compromiso y fidelidad a Gimnasia, mientras cientos de triperos coreaban su nombre.
Ecos de una gran noche tripera, llena de emoción, cánticos y homenajes. Una fiesta en la que se juntaron los héroes de una gesta que quedó en la historia, y los abanderados que vinieron a poner el pecho, demostrando que vale la pena, formar parte de esta patriada.
