Te adelantamos la editorial de Letra G número 50. Sale el domingo pero ya la podés leer y opinar en web@letrag.net
La sensibilidad es la capacidad de respuestas a muy pequeños estímulos o causas. Cuando el estado de ánimo no es óptimo, esa sensibilidad es muy fina, muy endeble.
La situación del Lobo hoy, presenta esas características. No son buenos los resultados, hay poca paciencia y existe una fuerte preocupación en torno al futuro inmediato de la Institución.
Ante este panorama, Gimnasia se presenta como un ámbito ideal para los medios de comunicación, al momento de generar noticias que alteren los ánimos de la gente; en definitiva, que provoquen una alteración de esa sensibilidad.
Luego del partido con Tigre se criticó fuertemente al equipo. Se cuestionaron los cambios que realizó el DT y hasta se apuntó a la dirigencia por no haber traído los refuerzos necesarios.
Luego, en el partido con Central, la situación se revirtió: se habló de la actitud de los pibes, de que con ellos los problemas estarán resueltos y de que el técnico Sanguinetti le transmitió a los jugadores ese sentimiento genuino de amor por Gimnasia.
Más tarde, después de la derrota con Argentinos, todo volvió a ser una tragedia. Se volvió a recaer en lo juveniles: que no tienen experiencia, que no van a poder sobrellevar la presión de una mala campaña, etc. A su vez, volvió a surgir el tema refuerzos y demás.
Y lo más grave aún, se habló de que Troglio podría dejar Independiente a la espera de que Sanguinetti abandone su cargo. Y de esa manera, habría chances de que se produzca el retorno al Club de Pedro Troglio.
Basta de echar leña. Gimnasia está en una situación complicada de la que sólo puede salir con el esfuerzo de todos. La realidad está muy clara, pero no se puede retroceder en el tiempo. Vinieron refuerzos, el plantel es joven y la va a tener que luchar día a día.
Pero no se puede inducir todo el tiempo al conflicto. El equipo va a ganar y va a perder y allí tendrá que estar la gente. Apoyando y alentando. Con una postura crítica seguramente, pero no haciéndose eco de los que venden a partir del mal momento del Club. Hay que esquivar el bombardeo mediático y trabajar todos juntos para sacar al Lobo adelante.