Las Lobizonas tienen su cancha propia después de años de lucha. Gracias a ellas y al aporte genuino de sus socios, el Bosquecito fue testigo de una jornada inolvidable que contó con la presencia de hinchas y deportistas de la institución.
"Fue mucho tiempo de poner y pelear por un lugar. Gimnasia no es un Club de fútbol, es un club con fútbol, y eso se ve reflejado", dijo Lucía Romagnoli, una de las personas que empezó a planificar un proyecto en 127 y 58 para que las jugadoras de hockey tengan su cancha propia.
Unos mil hinchas se acercaron ayer al Predio del Bosquecito, uno de los patrimonios más importantes de Gimnasia por funcionar de semillero y contención para cientos de pibes que no sólo realizan diversas disciplinas, sino que también estudian en la escuela secundaria René Favaloro. Ahora, vecinas de Ensenada, Berisso y la zona tienen un punto cercano para jugar a este deporte que ha crecido en los últimos quince años por el rendimiento de élite de Las Leonas.
Los veinticinco grados del lunes feriado vieron como las distintas categorías de hockey desplegaban una bandera gigante azul y blanca en el medio del césped sintético, y entre lágrimas, celebraban la apertura de un espacio que supo tener pastizales y que comenzó a soñarse en el año 2012. "Parecía utópico pero se hizo realidad", dijo la Lobizona Juliana Olivero, una de las tantas que militó la idea de un espacio propio.
Pedro Troglio, Alicia y Paula Casamiquela, Mariano Messera y distintos deportistas de básquet, esgrima, vóley, fútbol y futsal se acercaron a acompañar a las Lobizonas. El "Indio" Ortíz disfrutó emocionado junto a su hija Luz, actual Lobizona. Incluso, deportistas como Pablo La Bella de Básquet y Milagros Oliver de Fútbol Femenino se animaron a agarrar el palo de hockey y disputar alguno de los encuentros que se armaron para celebrar este hecho histórico.
Distintas instituciones platenses como el Club Universitario, felicitaron a Gimnasia y le entregaron una placa conmemorativa con la fecha del 15 de octubre de 2018.
Una vez más, como dice la frase, las luchas perdidas son las que se abandonan.