Las jugadoras de Hockey nos recibieron este mediodía en El Bosquecito y se mostraron felices por el presente. La lucha histórica por las tierras, la unión entre las categorías y las mujeres como protagonistas, en otra nota del ciclo de entrevistas de Letra G.
Los empleados del bosquecito nos contaban el presente: todas las tardes chicos y chicas de fútbol, futsal y hockey de todas las edades habitan el predio en las canchas de pasto y césped sintético de uno de los patrimonios más importantes del Club, donde también habita la escuela primaria y secundaria.
Gimnasia recibió una porción de los terrenos del Puerto de Buenos Aires hace años y lo explota con amor y dedicación. Así lo demuestran Juliana Olivero, Soledad Fernández, Andrea Bello, Micaela Macho y Oriana Celi, algunas de las tantas Lobizonas que levantan la bandera azul y blanca.
Juliana Olivero es una de las abanderas de la lucha por las tierras y repasa el pasado para llegar a este presente: “Haciendo un racconto de lo que fue el Hockey, el proyecto lo trajo Luciana Romagnoli que fue nuestra coordinadora. Paso a paso y a través de los años hemos logrado conseguir un lugar en el Bosquecito, era una cancha de infantiles y nos dieron el espacio para poder entrenar”, relata y agrega: “Desde nuestro lado siempre hemos apoyado y tratado de seguir adelante, logramos llegar a una cancha de sintético. Las luchas han sido fuertes, duras y dolorosas, a veces nos hemos sentido dejadas de lado y sin embargo con perseverancia lo logramos. Hoy podemos decir que es un sueño cumplido y nuestro hogar”.
En el Hockey pese a la diferencia de colores, se observa una gran unión entre los clubes. Es así que en la semana un jugador de Estudiantes recibió un golpe importante y las jugadoras de Gimnasia se sumaron al pedido de fondos para la recuperación del pibe, que vive en condiciones vulneradas. Son alguno de los hechos puntuales que se observan semana a semana y demuestran el carácter social de Gimnasia, que va más allá de un deporte.
Micaela Macho es una de las delanteras de la primera, apasionada desde los cinco años por este deporte. “Gimnasia fue sancionado a mitad del siglo XX por 99 años debido a un hecho particular de un jugador con un árbitro, pero por la insistencia y la lucha pudimos levantar la sanción y hoy estamos compitiendo en todas las categorías. Jugué en GEBA y me vine al Lobo, la idea es seguir vinculada a este deporte toda la vida”, expresa con alegría.
Soledad Fernández es una de las jugadoras que también se dedica a formar a las más pequeñas del Club, por eso reflexiona con voz autorizada: “El hockey está en un proceso de aprendizaje y crecimiento , por eso celebramos cuando logramos resultados porque eso habla de un trabajo y dedicación que venimos haciendo jugadoras y cuerpo técnico. Tenemos desde Décima a Primera división e incluso se tuvo que hacer una separación por la gran demanda de jugadoras. Para muchas de nosotras fue doloroso porque nos separamos de amigas, pero tiene que ver con nivelar para arriba en la disciplina”, argumenta sobre el terreno que inauguraron hace meses con la presencia de una multitud.
“ Estar en Gimnasia no es un esfuerzo, es un placer. Realmente son muchas horas en el club, los fines de semana arrancamos temprano”, indica Fernández, quien como la mayoría de las chicas tiene un pañuelo verde en posicionamiento al debate por la legalización del aborto.
“Ninguna jugadora se queda afuera por tema económico, Gimnasia es un club social y se trata de eso. De tomar posición ante los temas en debate. Las que trabajamos como profes estamos becadas, lo que nos complica son los micros un poco caros, pero es la situación en la que estamos a nivel nacional y de club”, sentencia Andrea Bello, la capitana de la primera división que al igual que Fernández reparte su tiempo entre el entrenamiento personal y la capacitación a las nuevas generaciones.
Oriana Celi es la capitana de la categoría Intermedia y cuenta que reparte sus días entre Gimnasia y el estudio, ya que estudia Ingeniería Química: “Creo que formar la cabeza y el cuerpo es la mejor combinación que me pudo pasar. Este grupo es muy lindo y se ve cada fin de semana”, cuenta. Al igual que nos contaron las futbolistas de Femenino, las chicas de Hockey tratan de seguir los distintos deportes cuando el tiempo las deja.
Las chicas vinieron con los palos y la pelota y jugaron cual adolescentes, con las mismas energías que cualquier pibe. La pasión por el deporte las une y demuestran gran capacidad para seguir creciendo. Los hinchas y socios debemos acompañarlas, volverán a jugar de visitante ante Champagnat B y volverán a casa en dos semanas.
Informe: Santiago Giorello
Fotos: Ramiro Domínguez
