Su mejor partido del año Gimnasia lo jugó en noviembre. Superó a Vélez de inicio a fin en el Bosque, revalidó el triunfazo de la semana pasada en el Monumental, tiró a la mierda la calculadora y se ilusiona con meterse en la fase final del campeonato.
Lo hizo Zaniratto, con un libreto simple y complejo a la vez: con táctica, juego, estrategia, humildad, trabajo y amor propio. Gimnasia es otro equipo, y el DT, a esta altura, pareciera merecer una continuidad tras las elecciones de noviembre.
¿Qué pasó en 60 y 118? Que Gimnasia volvió a ser un equipo de fútbol como lo había sido ante River. Manejó los hilos y encontró en Nicolás Barros Schelotto una figura trascendental. Hay que llevarlo de a poco, pero el pibe jugó su primer partido en el Zerillo y fue para ponerlo en un cuadrito.
Los demás, puntos altos. Martínez sacó todo abajo, Piedrahíta y Merlini le metieron chispa y el Chelo Torres volvió a dejar en claro que sabe muy bien lo que hace. Él abrió el camino con un golazo y lo liquidó el pibe Merlo, de contra, con otro golazo. Ambas asistencias del colombiano.
Gimnasia abrochó tres puntos de oro. Ganó sin objeciones. Y se prepara para una final en Vicente López, donde irá en busca de la tercera victoria consecutiva para meterse en la fase definitoria del campeonato. Aplausos, nobleza obliga. ¡Y dale Lobo toda la vida!
Agustín Colianni